El sensor infrarrojo encargado del sistema FaceID en el iPhone X es ahora de menor calidad
Apple ha comenzado a contar los días hasta que su smartphone prémium toque finalmente las tiendas físicas de Estados Unidos y otro montón de países. En particular, el 3 de noviembre es la fecha señalada para debutar en el mercado local y algunas prestadoras de servicios ya han comenzado a publicitar su lanzamiento.
Pero para llegar hasta el 3 de noviembre el iPhone X sufrió un sin fin de percances en su etapa de ensamble y de fabricación y la solución que finalmente consiguió acelerar y estabilizar el ritmo productivo puede que deje insatisfechos a muchos consumidores: el sensor infrarrojo frontal encargado de llevar adelante el reconocimiento facial (al que Apple dio a llamar "FaceID" es ahora de peor calidad.
Un reporte del reputado sitio de negocios Bloomberg dio cuenta de esta modificación. Es vox populi que Apple es extremadamente exigente con los controles de calidad de los componentes que van a parar dentro de sus teléfonos, pero de seguro esto fue particularmente cierto durante la etapa de producción del iPhone X, razón para que la producción fuese tan agónicamente morosa.
Pero en vista de que la demanda por el iPhone X se disparaba por las nubes, incluso muy por encima de los cálculos que Apple había vaticinado con cierto optimismo, Apple tuvo que sacrificar la calidad de algunos de los componentes involucrados en el ensamble del proyector de puntos láser, proyector que cumple un rol protagónico en la tecnología FaceID desarrollada por la compañía de la manzana prohibida.
Inicialmente, Apple había anunciado en su evento de presentación del iPhone X que la tecnología FaceID podría fallar solo en una oportunidad por cada millón de intentos, cifras muy por encima de la probabilidad de una a cincuenta mil de la tecnología TouchID de reconocimiento de huellas dactilares.
¿Habrá Apple sacrificado seguridad por velocidad de producción? ¿Es ahora FaceID menos responsivo, menos veloz, menos confiable, menos seguro, tanto que esta reducción de componentes podrá apreciarse en los primeros días de experimentación con el reconocimiento facial? Cualquiera sea el resultado final, Apple está obligado a que el sistema FaceID alojado en la cámara frontal del iPhone X sea, cuando menos, más seguro que el eludible sistema de reconocimiento de iris instalado en el Samsung Galaxy S8/S8+ y Samsung Galaxy Note 8.