Bill Gates confiesa su mayor fracaso a la cabeza de Microsoft: no haber comprado Android
El futuro estuvo por muchos años en manos de Bill Gates aunque, más específicamente, lo estuvo en manos de Microsoft. Pero por culpa de una mala decisión, Microsoft dejó ir una oportunidad inmejorable: Bill Gates admite haberse equivocado al no comprar Android y haber decidido empujar el desarrollo de Windows Phone para competir.
Bill Gates, el anterior CEO de ls multimillonaria compañía que signó el mundo de la tecnología y la computación para la humanidad estuvo a una decisión de plantar a Microsoft no solo como el principal competidor de Apple, sino como la compañía más influyente del mundo de la tecnología incluso hasta el día de hoy.
Bill Gates subestimó lo revolucionario de los iPhones
La primera impresión que se llevó Bill Gates de los iPhones cuando aún estaba a la cabeza de Microsoft era que nadie podría querer tipear en una pantalla, sin acceso a teclas físicas que le permitieran mayor agilidad y fidelidad de input.
Huelga decir que estaba rotundamente equivocado, pero de eso se trata: Bill Gates admitió que posiblemente ese haya sido el error más grande de su carrera en Microsoft.
Este fue, además, un error por partida doble, pues luego de haberse equivocado acerca del ratio de adopción que tendrían los smartphones táctiles también se equivocó acerca de la necesidad de adquirir Android.
Bill Gates admite haberse equivocado al no comprar Android, una empresa que hoy el propio empresario valúa en US$400 y cuyo error al no adquirirla considera invaluable y el mayor cometido en toda su vida como especialista en el rubro.
En su momento, Bill Gates admite haber considerado que la interfaz aceitada de Windows Phone podía competir con la anticuada y simple presentación de Android pero luego comprendió que la verdadera diferencia de plataformas se hallaba en la accesibilidad de aplicaciones.
Mientras que Android era reconocida como la principal fuerza alternativa a iOS en el mundo de los dispositivos móviles, Windows Phone era meramente una interfaz vistosa. Las consecuencias concretas del error de Bill Gates se consumarán definitivamente el próximo 10 de diciembre cuando Microsoft deje de darle soporte a Windows Phone de una vez y para siempre.