Noticias

Su Samsung Galaxy S8/S8+ y Bixby no podrán separarse nunca

Casi en cualquier mercado, no importa cuánto una compañía se haya esforzado en su producto sabe reconocer que, en última instancia, la valía del mismo está determinada por los consumidores, los demandantes. Sin embargo, como suele suceder en algunas casos, algunas compañías son lo suficientemente obstinadas como para no admitirse que su producto es sencillamente subpar y que se prefieren otros por sobre el suyo.

Muchos usuarios han optado por remapear el botón de sus Samsung Galaxy S8/S8+ cuando en la primera versión del firmware esto era posible. Luego, cuando se deshabilitó esta opción, aplicaciones en la Google Play Store le permitían a los usuarios precargarle una ruta de acceso a Bixby ni bien se lo convocase, acción que redundaba en una suerte de remapeo por proxy. Bien, parece que esto también está prohibido.

Samsung no quiere bajo ningún punto de viste que Bixby sea desalojado de su botón especialmente diseñado ni tampoco que se lo utilice como proxy para abrir otras aplicaciones, convicciones que ratifica actualización tras actualización. Sorprende en Samsung una testarudez supina, pues hay una razón puntual y muy clara para esto: Bixby no es el asistente inteligente que prometieron.

En la mayoría de los países, incluso, Bixby a duras penas es más que cualquier IA de búsqueda, pues no tiene propia voz ni reconoce la de los usuarios, tampoco. Un IPA de estas características es más un incordio que una facilidad y, con estas actualizaciones, se siente más que nunca una imposición en lugar de una propuesta.

En estos términos, Samsung más que competir con Cortana, Alexa o Siri, está forzando a Bixby, casi como habiéndole comprado un título nobiliario y quererle hacer creer a toda la corte que este nuevo noble, mudo y desprolijo, está a la altura del protocolo y las circunstancias. Es natural que los desarrolladores de aplicaciones excavarán con la esperanza de encontrar otra forma de eludir la inoperancia, lo inerme de Bixby. Al menos, así será hasta que Samsung le enseñe a Bixby los idiomas más hablados del planeta y lo haga hablarlos e interpretarlos.